El día de ayer, un grupo de 5 académicas de las Facultades de Ciencia y Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago de Chile, realizaron la ceremonia mapuche Wiñoy Antv Tripantu, con el objetivo de realzar y conservar la convivencia intercultural en nuestra Casa de Estudios.
A la actividad asistieron la Dra. Elisa Loncon, expresidenta de la Convención Constitucional y académica del Departamento de Educación de la Facultad de Humanidades; el decano de la Facultad de Ciencia, Dr. Juan Escrig, y el Kimche, Juan Ñanculef, entre otras/os integrantes de nuestra comunidad universitaria.
La ceremonia, que constituye la renovación del compromiso para proteger y cuidar a la madre tierra, justo en un período en que ella inicia un proceso de revitalización de las energías para una nueva etapa de producción, se inició plantando un árbol nativo (Trihue) y realizando una rogativa que se remitió a la noción de Estado plurinacional y a un Chile que presente una mayor justicia social.
Luego se efectuó el izamiento de banderas de pueblos originarios, en el que participaron 2 estudiantes de nuestra Casa de Estudios, pertenecientes a los pueblos Mapuche y Aimara.
En palabras del decano de la Facultad de Ciencia, Dr. Juan Escrig, esta actividad es una ceremonia muy importante para la Institución, dado su carácter intercultural, pero también por la interacción que se genera entre diferentes unidades mayores de la Usach.
“Fundamentalmente participan docentes, que a través del fuerte contacto que tienen vía proyectos con diferentes comunidades de pueblos originarios en el país, nos permiten acercarnos ya no solo desde las ciencias exactas, sino que también desde otras áreas al entorno que nos rodea”, aseguró la autoridad.
Interculturalidad y nueva Constitución
La Dra. Loncon comenzó su intervención durante el posterior conversatorio indicando que la etapa de la Convención Constituyente ha concluido. “Después de dos siglos de independencia nos reunimos todas las diversidades, sean sexuales, territoriales, de pueblos originarios y más, para escribir una Constitución para Chile”.
También enalteció el hecho de que sus integrantes hayan sido elegidos democráticamente, para así desarrollar un texto que se avala en su conformación paritaria, que presenta demandas indígenas, y en la que, además, se asumió el desafío de la crisis climática mundial a través del Derecho a la Naturaleza.
Junto con ello, valoró que el borrador de la nueva Constitución se base en los términos de paridad, regiones autónomas y derechos sociales tales como la educación y la salud pública, las pensiones y vivienda digna, el derecho de los niños, niñas y adolescentes, el derecho al agua, entre otras.
“La Constitución del 80’ consagraba un Estado Subsidiario de las empresas, lo que generó grandes acumulaciones de riqueza en desmedro del pueblo. Esta nueva Constitución, se considera como un Estado Social, de Derecho Social, Plurinacional, Ecológica y Regional, siendo un logro enorme que responde a las necesidades de la sociedad del siglo XXI”, aseguró la académica de la Facultad de Humanidades.